Por desgracia, el bruxismo es una patología que vemos cada vez más en nuestra clínica dental. El estrés y la ansiedad que rodean nuestra vida inciden directamente en el origen de esta afección que se caracteriza por el rechinamiento o apretamiento de los dientes, lo cual tiene serias consecuencias para la salud oral. Por eso, como dentistas expertos en Las Palmas, te explicamos con claridad las señales de bruxismo, para que vengas a vernos en caso de cumplir con alguna o todas ellas.
¿En qué afecta el bruxismo?
El bruxismo es una acción involuntaria que suele afectar cuando duermes, aunque puede manifestarse en otros momentos, como cuando requieres de gran concentración. Esta patología debe tratarse a tiempo, ya que provoca un gran desgaste de las piezas que puede conllevar sensibilidad dental y trastornos en la articulación temporomandibular, entre otros.
Señales de que padeces bruxismo
Al ser una afección que se manifiesta en nuestras horas de sueño, es muy habitual que no te des cuenta de que aprietas los dientes. Por ese motivo es importante saber identificar cuáles son las señales de que padeces bruxismo y acudir al dentista.
1. Tienes dolores de cabeza o cervicales recurrentes. Las cefaleas y dolores de cervicales son una de las consecuencias más comunes de padecer bruxismo, debido a la fuerza constante que ejerces al apretar la mandíbula.
2. Dientes fracturados o con grietas sin explicación aparente. Si no has sufrido ninguna caída ni golpe, pero observas que tienes alguna pieza deteriorada, puede ser por el bruxismo.
3. Padeces sensibilidad dental. El bruxismo desgasta el esmalte dental, lo que origina que la dentina quede más expuesta y provoque dolor con la ingesta de alimentos muy fríos o calientes.
4. Sientes chasquidos en la mandíbula. Puedes tener un problema en la articulación temporomandibular (ATM) provocado por la fuerza excesiva ejercida durante horas.
5. ¿Descansas bien? La sensación de cansancio y de no haber dormido bien es otro habitual del bruxismo, ya que altera las horas de sueño e impide la relajación.
Si crees que cumples una o varias de estas señales de alerta, ¡no hay duda! Contacta con nosotros cuando antes para determinar el origen del problema y comenzar un tratamiento acorde.